Última Hora | Un terremoto en Lisboa de magnitud 5.5 se siente en Matalascañas

Un terremoto de magnitud 5.5 con epicentro en Lisboa se siente en Matalascañas y otras zonas de la provincia de Huelva, Sevilla y Marruecos.

Esta mañana, a las 6:11 h., un terremoto de magnitud 5.5 en la escala de Richter en Lisboa se ha dejado sentir en la Playa de Matalascañas y otras zonas de la provincia de Huelva, según ha informado el Instituto Geográfico Nacional (IGN). El epicentro del seísmo se localizó en el océano Atlántico, a unos 100 km de la costa de Portugal y al sur de Lisboa, a una profundidad de 19 km.

La intensidad del terremoto ha sido tal que se ha sentido en varios puntos de Andalucía, incluyendo la Playa de Matalascañas, así como en otras áreas de la provincia de Huelva, Sevilla e incluso Marruecos.

Además, como es habitual en estos casos, el terremoto ha sido seguido por una serie de réplicas. A las 7:40 h. de esta mañana, el IGN ha registrado una réplica de magnitud 1.8, aunque de menor intensidad.

Las autoridades han instado a la población a mantener la calma y estar atenta a posibles nuevas réplicas, aunque no se han reportado daños significativos hasta el momento.

Los terremotos en la zona de Lisboa: una amenaza constante

El área cercana a Lisboa, ubicada en el suroeste de la península ibérica, es conocida por su actividad sísmica. El terremoto registrado hoy se suma a una larga historia de movimientos telúricos en esta región, donde las placas tectónicas africana y euroasiática interactúan de manera continua, provocando temblores de diversa magnitud.

Uno de los terremotos más devastadores en la historia de Europa tuvo lugar en Lisboa en 1755, cuando un seísmo de magnitud estimada entre 8.5 y 9.0 causó la destrucción de gran parte de la ciudad y un tsunami que afectó a las costas atlánticas de Portugal, España y el norte de África. Este desastre tuvo un impacto significativo no solo en la geografía de la región, sino también en la política, la religión y la filosofía de la época.

Aunque los avances en la tecnología y la infraestructura han mejorado la capacidad de la región para resistir terremotos, los expertos señalan que la zona sigue siendo vulnerable. Los terremotos en esta área no son infrecuentes, y los habitantes de Lisboa, así como las áreas cercanas en el Atlántico, como la Playa de Matalascañas, deben estar preparados para posibles movimientos sísmicos.

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